¨Qué solos se quedan los muertos¨ Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870)
Escrito por Chus Monroy el 01/04/2020
Los hospitales abarrotados, las UCIS saturadas, los homenajes a los héroes se suceden todos los días, los informativos incesantemente nos abruman con datos cada vez más aterradores y con los consabidos¨ esto habría que haberlo hecho antes¨ ¨qué chapuza de gestión¨ .
Entretanto , está pasando de manera casi desapercibida , un echo espantoso , una tragedia humana sin parangón en nuestro país ,salvo que nos remontemos a la guerra civil Española (1936-1939) muchos , muchísimos , de nuestros mayores están muriendo solos , sin una mano de un familiar que alivie el trance para los dos, , el que se va y el que se queda ; las familias no pueden velar a sus muertos . Lo que está pasando en las residencias de ancianos nos hace pasar por los estados de negación, ira, enfado, depresión y aceptación. Vivimos nuestro propio Sarajevo.
No poder acompañar en sus últimos momentos a las personas que otrora lo han dado todo por nosotros es uno de los episodios más devastadores a los que puede ser sometido el ser humano, de los que dejan una huella que nunca olvidas, de amargura e impotencia, de rabia e injusticia…
Una generación, la que está falleciendo ahora en las residencias, para las que el gran motivo de su vida ha sido sacar a su familia adelante, a veces con dos y tres trabajos
Una generación que se volvió a hacer cargo de sus hijos, ya mayores, y se sus nietos, cuando la crisis del 2008 azotó sin piedad a la sociedad Española. Que ya entrados en años han vuelto a salir a la calle a defender sus pensiones.
Después de 40 o 50 años cotizados a la Seguridad Social son demasiado mayores para ser atendidos por esta. Se ven sometidos a una criba de selección natural. No hay respiradores para todos. y para colmo cuando fallecen no pueden despedirse de sus familias .
Es una tragedia sobre la que habrá que pedir responsabilidades en su momento.
Que tristemente actuales se hacen aquellos versos de Gustavo Adolfo Bécquer:
¿Vuelve el polvo al polvo? ¿Vuela el alma al cielo? ¿Todo es vil materia, podredumbre y cieno? ¡No sé ; pero hay algo que explicar no puedo . Que a la par nos infunde repugnancia y duelo, al dejar tan tristes, tan solos a los muertos.